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sábado, 26 de marzo de 2016

FUENTE DE LA PASADILLA


En contestación al amigo José, lo que puedo comentar de esta fuente y que muchos villafranqueños hemos conocido, es que siempre se ha tenido acceso a ella para uso y disfrute de su agua que servía para poner tiernos los garbanzos de los cocidos que guisaban los vecinos no sólo de Villafranca, sino también de los pueblos de alrededor.

Fuente de La Pasadilla


Tengo que decir que no tengo base documental sobre este tema y mi comentario se basa solo en mis recuerdos, decirte que así como conseguir la propiedad de la ermita y su entorno fue durante los años setenta y ochenta una de las grandes aspiraciones del municipio, hasta el punto de que se llegó a crear una plataforma ciudadana, en la que estaban inscritos prácticamente todos los villafranqueños, para lograr que los antiguos propietarios la cedieran al pueblo. Sin embargo la justicia dio la razón a los dueños de la finca y los vecinos tuvieron que renunciar a sus pretensiones, y tengo que decir que quizás esto pudo acabar favorablemente hacia el pueblo si por aquel entonces se hubiera contado con el apoyo municipal y religioso para conseguir la ermita de El Calvario y su entorno. La Iglesia solo se limitó a decir que no haría nada pero si se lograra recuperar la ermita para el pueblo, esta pasaría a propiedad de la Iglesia.



Creo entender que cuando esta finca es vendida a una sociedad que pretendía crear un complejo turístico, incluido campo de golf, sobre el año 2006, Francisco Javier López Casado, alcalde de este municipio, llegó a un acuerdo con los entonces propietarios del recinto religioso para que éste y 200 hectáreas de sierra que se encontraban a su alrededor, pasasen a ser propiedad municipal, recuperando para el pueblo este edificio religioso así como su entorno y también la cercana fuente La Pasadilla.


Como esto no se llevó a cabo, ni tampoco sé quiénes son los dueños actuales, tendríamos que indagar en qué quedó ese acuerdo o estamos como al principio, sin nada. Lo que sí es cierto, es que tanto la ermita como la fuente, son un enclave que tiene un gran valor sentimental para los villafranqueños y de paso su recuperación, conservación y restauración sería una suma más al potencial turístico de nuestro pueblo.


Os dejo unas fotos tomadas en el año 1992 y otras más antiguas donde se puede ver a paisanos llenando agua de la Pasadilla, a Paqui Torralbo, sobre el pilar antes de su deterioro y otra con Elvira y mi hija una tarde de domingo que la llevamos para que conociera esta fuente y tomase posesión de ella, como villafranqueña. Como anécdota no habíamos llegado a la fuente cuando se presento como un rayo el dueño de la finca para pedirnos explicaciones, le comenté que en ningún momento me había salido del camino y que la servidumbre de éste y la fuente desde tiempos inmemoriales eran públicos, se dio media vuelta y se fue, aunque sé que en otras ocasiones la cosa no acabó así.












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