RECUERDOS DE MIS RAICES. AÑO 2010 Nº VI. FAMILIA CASTILLA MORENO

Familia Castilla Moreno 

Apreciados vecinos y amigos de Villafranca 
Somos Antonio y Catalina y ésta es la breve historia de nuestra vida en común desde que partimos de Villafranca hace casi 40 años. 
Yo, Antonio Castilla Molina, nací en Bujalance aunque desde muy pequeño residí en Villafranca de Córdoba porque mi padre, José Castilla, conocido como "Pepe el del Lomo" trabajaba allí como encargado de la finca. 

Después de una vida dedicada a las tareas del campo, en enero de 1971 decidí emprender camino hacia Barcelona en busca de trabajo, ya que parte de mi familia había ido hacia allí años antes. Una vez transcurridos unos meses y habiendo conseguido un trabajo con el que poder formar una familia regresé al pueblo para buscar a la que sería mi mujer, Catalina Moreno nacida en Villafranca e hija de Antonia, trabajadora durante más de 20 años en "Casa de Pepe Díaz" y Juan Albañil y trabajador en la tejera.

Familia Castilla Moreno

Contrajimos matrimonio el día 5 de agosto de 1971, en la iglesia de Santa Marina de Aguas Santas, y 5 días después emprendimos el largo viaje hacia Barcelona, dejando a nuestros padres y nuestra familia atrás, donde conseguimos a base de esfuerzo estabilizar nuestras vidas juntos hasta el día de hoy. Nunca hemos dejado de volver, ya que seguimos manteniendo contacto con nuestros amigos de juventud. Las constantes visitas a nuestra familia servían de excusa para volver a reunirnos como en aquellos tiempos y recordar que el tiempo ha ido pasando pero casi seguía igual después de casi 40 años. Dos años después de casarnos, nació nuestro hijo José Antonio, y tres años después de él nació nuestra hija, Sonia, a los que inculcamos el cariño por nuestra tierra.

Una vez que nuestros padres fallecieron, hemos continuado manteniendo la casa de ellos en el pueblo para poder escaparnos cuando podemos, ya que tanto como nosotros como las nuevas familias que han formado nuestros hijos también continúan relacionándose con las mismas amistades que hicieron cuando ellos eran pequeños y viajaban con nosotros cada año, y con la misma esperanza de que esto sea una cadena que continué con nuestros nietos.

Ahora, que ya estoy jubilado, aprovecho más todavía los momentos en los que podemos escaparnos y volver a nuestra "casa" para pasar largas temporadas, estando a caballo entre Villafranca y Barcelona.
Gracias por acordaros de nosotros desde la distancia, aunque nosotros siempre os tenemos presentes.
Un fuerte abrazo para todos y hasta pronto.
Antonio Castilla y Catalina Moreno